La tensión se dispara antes del clásico

Las horas previas al gran duelo se calientan. Desde la cúpula hasta el vestuario, la crispación es máxima y la rivalidad amenaza con desbordarse.

El ambiente previo al Clásico entre Real Madrid y Barcelona está al rojo vivo. No solo por lo deportivo, sino por una acumulación de tensiones que atraviesan desde los despachos hasta el vestuario. Según informa Marca, la relación entre Florentino Pérez y Joan Laporta lleva meses rota, y la comunicación entre ambos clubes es prácticamente inexistente.

En el entorno blanco se respira un sentimiento de revancha. La pasada temporada fue un golpe difícil de digerir para los madridistas, que vieron cómo el conjunto azulgrana se impuso en los cuatro Clásicos disputados. Esa herida sigue abierta y se ha convertido en un motor de motivación para el equipo de Xabi Alonso, decidido a recuperar el orgullo perdido.

Pero no solo la directiva está encendida. En el vestuario del Real Madrid hay también malestar. Jugadores y cuerpo técnico estarían molestos con la actitud de Lamine Yamal en los últimos días, a quien acusan de falta de respeto y profesionalismo. Su comportamiento, según el citado medio, no ha pasado desapercibido y ha encendido aún más los ánimos antes del choque.

La suma de estos factores convierte el próximo Clásico en algo más que un partido. Es una cita marcada por el orgullo, las cuentas pendientes y la necesidad de reivindicarse. En el Santiago Bernabéu o en Montjuïc, poco importará el escenario: la tensión ya ha hecho su entrada mucho antes del pitido inicial.