La plantilla del Fútbol Club Barcelona ha acudido este domingo a la Ciutat Esportiva Joan Gamper para someterse a las pruebas PCR de detección de posibles casos de coronavirus. Estos tests son los necesarios para volver a los entrenamientos este lunes, después de los días de vacaciones que han tenido los jugadores tras caer eliminados de la Champions. No obstante, más allá de los resultados que puedan salir de los exámenes médicos, la noticia del día ha sido la ausencia de Leo Messi.
Los abogados del todavía capitán azulgrana ya avisaron al club que Messi no se presentaría en dichas pruebas puesto, que, según ellos, ya no pertenece al Barça. Se escudan en la famosa cláusula del contrato del ‘10’ mediante la que Leo podría decidir abandonar el club al final de cada temporada. Sin embargo, son muchas las incógnitas que sobrevuelan la situación del argentino y muy pocas las certezas acerca de su futuro.
Lo que está claro es que Leo Messi está harto. Harto de la directiva, principalmente, pero también cansado de los malos resultados en los últimos años. El mejor jugador del mundo ha dicho “basta”, y el terremoto que se ha formado en Barcelona es de una magnitud incalculable. Más si cabe, por las formas en las que Leo ha decidido salir del club.
Si bien se ha ganado, con creces, la potestad para decidir cómo y cuándo abandonar Can Barça, la mayoría estaremos de acuerdo en que las formas no son las óptimas. El pasado martes llegó un burofax a las oficinas del FC Barcelona en el que los abogados del argentino anunciaron a la directiva su decisión. Asimismo, además de esta fría manera de comunicar semejante noticia, Messi todavía no se ha pronunciado públicamente, algo que está decepcionando, y mucho, a gran parte de la masa social ‘culé’.
De hecho, ya son muy numerosas las voces que se alzan contra Leo y critican su actitud. En muchos casos, por desgracia, olvidando que el ‘10’ del Barça ha alzado al club a otra dimensión en los últimos años y les ha permitido disfrutar de su fútbol semana tras semana en el Camp Nou. Como si una mala decisión tuviera que hacer cambiar radicalmente la opinión de un aficionado sobre el mejor jugador del Barça de la historia. En esas estamos.
No seré yo el que critique a Messi, por mucho que considere que las formas no son las apropiadas. Pero sí que me surge una pregunta: ¿Por qué, Leo?. ¿Por qué así? ¿Por qué no te pronuncias públicamente? Nadie, o prácticamente nadie, en Barcelona duda de la incapacidad de esta directiva y su nefasta gestión. De hecho, los aficionados azulgranas se lanzaron en masa a las redes sociales para mostrar su apoyo incondicional a Messi las primeras horas después del anuncio. Sin embargo, con el paso de los días parece que cada vez hay más críticos hacia el argentino y menos hacia la directiva encabezada por Josep Maria Bartomeu, el gran culpable.
¿Por qué, Leo? ¿Por qué así? El mejor jugador de la historia del Barça, y uno de los mejores de la historia del fútbol, merece otro final. Después de 20 años en Barcelona, estoy seguro que lo último que desea el ‘10’ es abandonar así el club de su vida. Messi merece ser homenajeado con todos los honores, y salir por la puerta grande del Camp Nou si su decisión de marcharse es irrevocable. La afición ‘culé’ sabe lo que está perdiendo, es totalmente consciente, y esa mezcla de frustración, tristeza, rabia y decepción es una mala acompañante en estos días de incertidumbre. Unas palabras de Leo lo cambiarían todo.