Ni en Manchester ni en Londres. En Liverpool, pero por Everton, se encuentra el actual líder solitario de la liga inglesa. Hasta ahora el único invicto, junto con Aston Villa. Un inicio sorprendente en Inglaterra
Se vivió otro fin de semana con la energía, la sorpresa y el entusiasmo que transmite la Premier League. Volvieron a presentarse partidos de alto vuelo, con intensidad a lo largo de los 90 minutos, y con resultados surrealistas, impredecibles, que rompieron cualquier predicción.
Ya se había presenciado un inicio turbulento para los del Big 6. Para algunos se profundizó el presente insatisfactorio. Manchester City no pudo dejar atrás la última abultada derrota con Leicester, y apenas igualó en Elland Road ante Leeds, cuando había comenzado en ventaja. A diferencia de los Citizens, para los de Marcelo Bielsa significó un punto valioso, y llegaron al parón internacional con buenos resultados.
Manchester United y Liverpool, dos gigantes del fútbol inglés, sufrieron resultados humillantes. Dos versiones alejadas de su capacidad y su trayectoria. Ambos concedieron seis goles o más en un mismo día por primera vez en la historia.
En Old Trafford, Tottenham ha explotado al máximo su concentración, velocidad y eficacia, que se combinaron con los errores defensivos del local, y pasaron una tarde excesivamente divertida. Se repusieron al gol tempranero del rival, y lo sometieron hasta convertirle seis goles. Los Red Devils ya habían caído en la primera fecha ante Crystal Palace, también como locales.
A continuación se presentó la mayor sorpresa de la cuarta jornada: Liverpool protagonizó una noche para el olvido, y se marchó del Villa Park abatido. Aston Villa dio el golpe y, no sólo se llevó los tres puntos, sino que lo hizo por una diferencia de cinco goles. Un 7-2 que derrumbó toda predicción, y que estira la racha de los Villanos a tres victorias consecutivas en la misma cantidad de partidos disputados.


Sobre el final de la temporada pasada, el Villa logró la permanencia por una racha positiva sobre el cierre, mientras que sus rivales cayeron. Para este campeonato, la intención de atravesarlo con mayor alivio fue reflejada en el mercado de pases: Ollie Watkins, Emiliano Martínez, Bertrand Traoré y Ross Barkley. Además consiguieron la renovación de su emblema, figura y capitán, Jack Grealish, como la de su marcador central de confianza, Tyrone Mings.
Un equipo mejorado para Dean Smith, quien tampoco perdió a sus figuras. El inicio fue espectacular, superior a cualquier expectativa. Aston Villa ganó los primeros tres partidos de liga por primera vez desde la temporada 1962-63. Y, desde la campaña anterior, lleva siete encuentros sin conocer la derrota. Un presente para disfrutar hasta que vuelva la competencia.
Quien hasta ahora fue el único que ganó los 12 puntos posibles, fue el Everton de Carlo Ancelotti. El equipo del que mucho se habla. El que genera ilusión. Desde la llegada del experimentado entrenador italiano al club, la esperanza creció de inmediato. Ahora gozan de una actualidad que parece inmejorable. En Goodison Park realizaron un mercado de pases elogiable y abastecieron de figuras a su plantel.


De inmediato, James, Allan y Doucouré se integraron al once inicial, y la respuesta positiva fue instantánea. El colombiano se encuentra en buen nivel, cómodo en el equipo de Carletto, donde continúan con un desempeño fructífero Dominic Calvert-Lewin y Richarlison en el ataque. Una justa victoria por 4-2 ante Brighton extendió la racha ganadora y los Toffees se ubican, en soledad, en la cima del campeonato, con un récord perfecto. Ahora sumaron a sus filas a Ben Godfrey, proveniente del Norwich City, un refuerzo de categoría para su defensa.
La Premier League comenzó con gigantes heridos, con proyectos prometedores que sorprenden al situarse por encima de los poderosos, y con una lluvia de emociones, que se pondrán en pausa hasta que terminen los encuentros internacionales. Todavía queda mucho para disfrutar de la impredecible, atractiva y sorprendente liga inglesa.