El planteo de Guardiola sentenció la idea de Zidane
Con la victoria por 2-1 en el Santiago Bernabéu, el City llegaba con una pequeña chispa de ventaja sobre el Madrid que, tampoco contaba con Serio Ramos por su expulsión en el partido de ida. Pep notó rápidamente ese detalle y al igual que en la ida, planificó un partido especial y la salió a la perfección.
Ambos entrenadores optaron por un 4-3-3, sistema táctico caracterizado desde hace un tiempo en uno y otro equipo. Eder Militao en reemplazo del capitán madrileño y la novedad principal, el entrenador catalán ubicando a Foden como falso 9, al igual que hace un tiempo, cuando hizo lo propio con Lionel Messi.
Por un lado, Gabriel Jesús, con mayor experiencia como centro delantero, pero acostumbrado a jugar como extremo. Por el otro, Sterling, como un clásico wing derecho. El joven inglés de 20 años por el centro y con la posibilidad de realizar desmarques de apoyo para generar nuevos espacios. En la segunda mitad, ingresó Bernardo Silva, Sterling cambió de banda y el brasileño fue al centro, para fijar a los zagueros.
Los primeros minutos fueron de estudio. Quien entendió cómo se debía jugar el partido, al igual que en el Bernabéu, fue Guardiola. Con serenidad en los pies de Ederson, con reducción de espacios en situaciones de pérdida y sobre todo, con un factor fundamental: la posición de Kyle Walker, quien comúnmente se encargaba de la banda derecha, pero que hoy gracias a su técnica y a la confianza de su entrenador, se ubicó como “laterior” – (lateral alternando de interior) marcador de punta derecho, que atacaba por el centro como volante creativo-. De esta forma, se mostraba siempre como posible receptor, y liberaba a Kevin De Bruyne, para ejecutar sus cualidades sobre diferentes sectores del campo.
Los errores individuales defensivos del Madrid, provocados por la presión de su rival, le jugaron una mala pasada y causaron su eliminación. Además, los Citizens contaron con más oportunidades para liquidar el encuentro, pero luego de fallos en la definición o la intervención de Courtois o algún zaguero, evitaron que el marcador se continúe extendiendo.
Guardiola interpretó y se quedó con el triunfo táctico. Así se llevaba el triunfo bajo el brazo y generaba cierta incertidumbre en Zidane, que de esta forma inesperada, cierra con sabor amargo una aceptable temporada…