Chelsea a por un milagro ante el favorito Bayern Múnich

Imagen: fcbayern.com

En apariencia es la única llave «resuelta» de los partidos por jugar de octavos de final de la Champions League. Aún cuando todo puede pasar en el fútbol, y los de Lampard seguramente tendrán algo que decir, el 0-3 de la ida favorece al cuadro bávaro, sumado a que tendrán a favor también la localía. Además, el Bayern Múnich asoma como el gran favorito a ganar el máximo torneo continental europeo luego de la arrolladora temporada que ha tenido

Con el resultado a su favor, los del ‘Hansi’ Flick tienen esta oportunidad ante Chelsea para tomar ritmo competitivo. Con tan solo una baja (Benjamín Pavard por lesión), los bávaros podrán utilizar este partido para retomar la intensidad de juego mostrada pre y post parón.

Si el Bayern Múnich ya era uno de los mejores equipos en forma antes de la pandemia, con el regreso del fútbol los dirigidos por Hans-Dieter Flick han logrado mantener el juego de posición con dinamismo. La rápida circulación de balón, colocar a sus interpretes siempre de cara a portería rival, los constantes movimientos de apoyo y ruptura de sus jugadores y un dominio absoluto desde el balón, son parte de las características del equipo de Baviera.

Para este partido, Flick contará con el regreso de Thiago Alcántara, dando paso a Kimmich al lateral diestro para suplir la baja de Pavard. Así, conformará un doble pivote con el español y Goretzka, con características constructivas y destructivas, en base a talento y también imponencia física. A este engranaje de piezas se suma el buen momento con el que terminaron la temporada alemana Lewandowski, Muller, Gnabry o Alphonso Davies. Colectiva e individualmente, no pareciera que haya otro equipo en mejor forma que el Bayern Múnich.

Lampard quiere dar la gran sorpresa

Sin embargo, el Chelsea de Frankie Lampard siempre tiene algo para decir. Un equipo que tras el parón no conoció de empates: 8 victorias y 4 derrotas para un Chelsea que apuesta a un proyecto a mediano-largo plazo con la inclusión de muchas piezas jóvenes. Las bajas de Azpilicueta y Pedro supondrán una dificultad extra al ya duro reto de remontar un 0-3 en contra como visitante.

Como todo equipo prototipo inglés, los ‘blues’ han desarrollado un juego de ida y vuelta, pensando más en la portería contraria que en la propia. Llegando incluso, por momentos, a dar la sensación de ser un equipo fragmentado en mitad de cancha. Si bien Jorginho podría suponer un mejor manejo del ritmo de juego, lo cierto es que el transito por el sector medio en el Chelsea es más bien poco.

Lampard apuesta por un ataque directo, de poca elaboración y mucho movimiento de sus piezas, sobre todo en bandas, sector donde busca el desequilibrio con piezas como Pulisic, Mount o Willian. En ese “golpe x golpe” propuesto por Frenkie, también se ha desnudado la fragilidad defensiva de su equipo. Chelsea es un equipo con gran capacidad para convertir, pero también para recibir goles. La baja temporada de Kepa, dando paso a Willy Caballero como titular, grafican este problema.

Chelsea visitará al Bayern Múnich en una eliminatoria que pareciera ya estar resuelta. Mientras los ingleses buscarán dar un golpe a la cátedra, los bávaros buscarán retomar ritmo competitivo de cara a las siguientes fases del torneo continental.