Partidazo en la capital italiana entre dos equipos que llegan con rachas opuestas. Los romanos han comenzado de manera muy irregular la Serie A, mientras que los de Dortmund llegan plenos de confianza tras su última victoria en Hoffenheim.
En un grupo tan igualado como el F cada punto cuenta, por lo que el duelo del Olímpico será una batalla de gladiadores en el que la victoria puede ser un paso de gigante para la clasificación final. Los alemanes llegan muy altos de moral tras haber sacado adelante un partido complicado en el estadio del Hoffenheim, dando además descanso a algunos titulares como Bellingham, Guerreiro o Haaland. Además este último fue decisivo con el pase de gol a Reus en la segunda mitad.
Por su parte los italianos llevan apenas una victoria en 4 jornadas y dos dolorosas goleadas en contra ante el Atalanta por 1-4 y este pasado fin de semana en Génova contra la Sampdoria por 3-0. Los celestes esperan evadirse de ese mal comienzo y disfrutar de una Champions a la que vuelven tras más de una década. Los de Simone Inzaghi saben que incluso en una situación como la actual donde el público no es tan determinante, el pase a la siguiente ronda se tiene que conseguir en el Olímpico, así que saldrán a morder en busca de 3 puntos importantísimos.
Será además un bonito duelo entre el máximo goleador europeo de la temporada pasada, Ciro Immobile, y uno de los arietes llamados a hacer historia durante la próxima década como es Erling Haaland. Será un buen día comprobar si la veteranía del italiano todavía puede marcar la diferencia ante el empuje del noruego…
Veremos con qué alineación sorprende, un Favre que parece que todavía no ha encontrado su once tipo, ni siquiera una forma de jugar predefinida. Da la sensación de que al equipo le sobra pólvora en ataque pero que necesita fortalecer la defensa para pelear en las 3 competiciones y en esa búsqueda se encuentra el entrenador alemán. Los «Borusser» esperan poder levantar el pulgar hacia arriba en el coliseo romano tras un triunfo a domicilio que les abriría las puertas de los octavos de final de par en par.